Tu identidad
es la que tiene que
salvarse
del consumo
que aturde la conciencia
con la presión radial
que incide con sus voces
para que mueras en el dial.
¡Decide por ti mismo!
Falsas banderas
levantadas en tu nombre,
señalan rumbos
sin fijar las metas
con algo que no existe
pero que se impone
porque se repite siempre igual.
¡Decide por ti mismo!