Por una cabeza, de un noble potrillo
que justo en la raya, afloja al llegar
Y que al regresar, parece decir:
No olvides, hermano,
vos sabes, no hay que jugar.
Por una cabeza, metejón de un día
de aquella coqueta y risueña mujer,
que al jurar sonriendo el amor que está mintiendo
quema en una hoguera
todo mi querer.
Por una cabeza, todas las locuras.
Su boca que besa,
borra la tristeza,
calma la amargura.
Por una cabeza,
si ella me olvida,
que importa perderme
mil veces la vida,
para que vivir.
Cuantos desengaños, por una cabeza,
yo jure mil veces no vuelvo a insistir.
Pero si un mirar me hiere al pasar,
Su boca de fuego
otra vez quiero besar.
Basta de carreras, se acabo la timba,
un final reñido ya no vuelvo a ver.
Pero si algún pingo llega a ser fija el domingo,
yo me juego entero,
que le voy a hacer!
Por una cabeza, todas las locuras.
Su boca que besa
borra la tristeza,
calma la amargura.
Por una cabeza,
si ella me olvida,
que importa perderme
mil veces la vida,
para que vivir.
Letra transcrita por Diego Vanegas