tierras melancólicas
enterréis el pasado
bajo cientos de años
de pisotones de invasores
torreones que en su día
sosegaron la desazón del patriota
dictado y dominado por leyes extranjeras
llévame quiero seguir recorriendo
los blancos pueblos los campos sedientos
llévame quiero seguir bebiendo de esta fuente
de este mundo enterrado bajo el cielo
los olivos se esparcen
marcando cada etapa del trayecto
a lo largo de la vía
la hierba se tuesta por el sol
y el cielo desnudo y limpio
marca la silueta de las montañas
que visten a rayas ante el calor
sólo el ave en el que monto
me devuelve al tiempo en el que vivo
tren perfecto y a la misma vez maldito
por interrumpir la siesta de estas tierras